martes, 14 de julio de 2015

Nada. Silencio...

Me vais a tener que perdonar...porque sinceramente, todos los días intento escribir sobre algo alegre, de un día normal en mi vida, de una tarde de piscina con mis niños, de una noche con mis amigas...pero lo cierto es que de lo único que tengo ganas es de desahogarme...

Escribir lo que vaya saliendo y ya veremos que sale...

Porque realmente ya no siento nada. Ni tristeza, ni rabia, ni coraje...

Nada. Silencio...

Pero lo único que tengo claro es que nunca, jamás, me volveré a dejar pisotear, ni arrastrar, ni rogaré y ya ni siquiera, lucharé.

Me ha dejado completamente seca.

Nada. Silencio...

No quiero verlo, ni mirarlo, ni escucharlo si quiera...

Es el padre de mis hijos, si, pero por mi, como si se desvanece....

Todo el mundo me decía que algún día mi Límite, sencillamente llegaría...

Y ha llegado. He recibido un bofetón sin manos. Es lo último que él ha hecho para rematarme.

Tocada y hundida.

Nada. Silencio...

Hace apenas una semana pensaba que sí, que si él quisiera volver yo le abriría las puertas y lo intentaríamos. Y así se lo dije.

Pero ahora es un NO rotundo.

¿Y sabéis por qué?

Porque ha conseguido borrar todo lo bueno...

Ha conseguido borrar los recuerdos, los momentos felices, ha borrado nuestras risas y nuestros besos...Todo. Lo ha borrado todo de un sólo plumazo.

Lo ha conseguido. Lo malo ha superado a lo bueno.

Lo único bueno que me queda de él son nuestros tres hijos.

Ignacio, Cayetana y Juan será lo único que compartiremos de ahora en adelante.

De su felicidad y bienestar será de lo único que hablaremos.

Se ha esforzado eh? se ha esforzado en hacerlo cada vez peor, cada vez una cosa nueva, un nuevo golpe, una nueva herida...

Hasta ahora pensar en él me provocaba ternura...Porque el amor que he sentido por él era muy grande. Tan grande que he sido capaz de aguantar lo inaguantable. De mirar para otro lado...Verlo me cortaba la respiración. Lo amaba tanto...que me negaba a renunciar a él. Y si él me daba migajas, con migajas me conformaba yo...

Y de un solo golpe y porrazo me ha despertado. O quizás este ha sido la guinda del pastel.

Así que por mi, como si se desvanece...

Que nunca deje de ser un buen padre. Eso es lo único que deseo.

Porque como marido...en fin, no es el lugar...

Y que no crea que le odio, ni que le guardo rencor, ni que estoy enfadada...No.

Simplemente ya no siento Nada. Silencio...

Por fin.

Besos desde el Sur

9 comentarios:

  1. Guapísima,que no te de apuro escribir lo que sientes,somos muchas las que te leemos con ganas,porque trasmites taanto ya sea bueno o malo..?! que me encanta tu trasnparencia a la hora de expresarte y la cercanía y sencillez que trasmites.

    Ahora toca sobrepasar este charco fanganoso que aveces te deja atrapada otras te hundía y ahora por fin estás saliendo..
    ERes fuerte y lo sabes, y tienes tres razones más que grandes para sonreir y darle siempre las gracias,por lo demás como tu dices,de momento...silencio..
    Mil besos!!! arribaa guapísimaaa!!!

    ResponderEliminar
  2. Quedate con el hecho de que tienes tres hijos preciosos gracias a él.... y sobretodo quédate con que tú vales mucho, no vuelvas nunca a conformarte con las migajas, o te zampas el pastel entero o no hay nada.
    Cuando hay una ruptura se van pasando todas y cada una de las fases de duelo, llegará el momento que te quedes con lo mejor que te dio y lo malo simplemente lo borres de tu mente.
    Es una pena que las cosas sean así.... pero ahora se te abre un mundo nuevo y diferente donde cada día es una aventura nueva por vivir y como tu vales mucho nena tienes que salir al mundo a comértelo a bocados.
    Bueno y cuando te de el bajón aquí estamos para subirte un poquito.
    Un besote

    ResponderEliminar
  3. Algún día ya ni te inspirará para escribir nada...espero que sea pronto, bss

    ResponderEliminar
  4. Beatriz L González15 de julio de 2015, 13:37

    Ahora, solo tienes que dejar que pase el tiempo y ver como poco a poco, vuelves a ser tu misma.
    Lo mejor ya lo has hecho: dejar de tener sentimientos, tanto de amor, como de odio. Las personas mantienen el odio y el rencor durante mucho tiempo y eso es justamente lo que les impide seguir adelante. El odio es un sentimiento, tan fuerte como el amor...
    Muchos ánimos porque la cuenta a atrás ya ha comenzado y a partir de ahora, todo va a ser mejor.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Beatriz, me ha gustado eso de la cuenta atrás ya ha comenzado...ojalá así sea! Un beso y gracias por estar aquí!

      Eliminar
  5. A mí me parece que has tomado la decisión acertada. No es justo ni bueno ni sano que sólo una parte de la pareja esté dispuesta a luchar. Como dice mi papá "jugamos en equipo o se rompe la baraja". Por respeto a ti y a tus hijos.

    ResponderEliminar