lunes, 21 de septiembre de 2015

Mamá Ogro

No sé si este fin de semana los torcidos han sido ellos o he sido yo. El caso es que anoche cuando los acosté y sentí una enorme paz me sentí mal por ello...

Mis hijos son niños buenos. Obedecen, son tranquilos y educados o al menos eso creo. Juan es un poco más movido, pero su edad lo delata, 22 meses...

El caso es que últimamente están un poco revolucionados. O yo muy cansada...O quizás un poco de las dos cosas...

Ellos no tienen la culpa de que yo a veces me sienta sola, que sienta que no lo estoy haciendo bien, que les grito demasiado, que todo me parece un mundo...

Y es que hay días como el de ayer que parezco un disco rallado y mi frase favorita es:

- Voy a contar hasta tres...UNO!!!

Y es que diré que ya no es que Juanito sea un trasto, ayer me di cuenta de que es más trasto con su hermana a su lado...Y es que la Rubia es mucha rubia. Todas las ideas las tiene ella...

Y ya que he empezado a quejarme voy a hacerlo bien..jajajja.

El sábado me entró una alergia de estas criminales, mocos, estornudos, picor de ojos...Vamos, que me levanté súper bien. Cómo sería la cosa que por la tarde estando en un cumpleaños de una amiguita de la clase, las mamis me miraban y se extrañaban de verme tan...plof.

Ya llegué un pelín nerviosa a mi casa. Y cansada, muy cansada...A veces el simple hecho de bajarlos del coche y pensar que tengo tres duchas por delante con sus respectivas peleas, ya me agota.

"Hoy no tocaba pelo...no quiero esa esponja...no me quiero salir el primero...Juanito que se le va la vida salpicando y lo pone todo perdido...etc etc..."

Mala madre number one que como venían con un empacho de la merendola del cumple, me ahorré las cenas. Un vasito de leche y a dormir.

Por suerte y para mi bien, al día siguiente no madrugaron mucho pero eso hizo que se levantaran con las pilitas muy cargadas. Sobre todo la Rubia y Juanito.

No os voy a enumerar todo lo que hicieron y lo que dio de si la mañana porque entonces no acabaría nunca.

Mejor os voy a contar cómo acabó el día. Ignacio agarrado a la barandilla de la escalera que no quería ducharse...no entra en razones y este niño dentro de un par de años tiene más fuerza que yo.

Imagino que estaría cansado. Que él tampoco tenía un buen día, o que quizás también echa de menos a su padre y es su manera de mostrar su disconformidad....

Porque él es un niño muy bueno...No suele liarme esas perretas.

El caso es que acabé muy enfadada con él.

A esas personas que dicen que a los niños no se les debe gritar, no se les debe dar un cachete aunque lo merezca, que lo ideal es el diálogo...

¿el diálogo? Quizás no son padres, o si, no lo sé...Pero yo a veces ya no puedo dialogar, más que nada porque mi hijos tienen 5, 4 y casi dos años respectivamente...y son cabezones como ellos solos.

Y repito, tengo la suerte de que son buenos.

Después de pelearme con Ignacio y convertirme en la niña del exorcista, llegó el momento de preparar las cenas. Con sus respectivas quejas de yo quiero y yo quiero lo otro.

No os olvidéis que yo seguía siendo mocosete con mi súper alergia...que ni centrar la mirada podía con los ojos como dos brótolas de tanto rascármelos...

La tonta soy yo por prepararle a cada uno lo que quería...Donde ha quedado eso de "esto es lo que hay y punto". No podía discutir más...

Vamos que me piden cenar chocolate y se lo concedo. Mala madre number two.

Yo veía por el rabillo del ojo que la Rubia y Mini Juan estaban planeando algo. Los dos juntos...en silencio...Mala señal.

Y se hizo el desastre. Consiguieron explotar una botella de dos litros de coca cola...Ellos salieron derrapando de la cocina, que ahora me río pero en ese momento la Rubia se llevó la colleja antes de coger la puerta de la cocina...

Eso parecía un aspersor...no os contaré el estropicio y las ganas que me entraron de matarlos.

Y en vez de hacer eso me puse a llorar...como las niñas chicas...absorbiendo más mocos, si podía...

Cansada....cansada....cansada....

Porque no me gusta gritarles. Porque no me gusta perder la paciencia. Porque ellos no tienen que verme llorar...porque no me gusta tener la mano larga...

Porque...porque....porque....

Y a pesar de la noche nefasta y este fin de semana de mamá ogro...Ellos hoy al despertar me han dedicado una gran sonrisa...y me han abrazado fuerte...

Y es entonces cuando me envuelve la culpa...Pero quiero que ellos sepan, si leen esto en algún momento de sus vidas, que su mamá lo hace lo mejor que puede...

Y aunque les grite y me entren ganas de tirarme en el sofá y hacerme la muerta, les quiero, les quiero con toda mi alma...

Y eso es lo único que importa...

Besos desde el Sur

Feliz lunes


8 comentarios:

  1. Eso no es una mama ogro, es una mamá agotada con unos niños traviesos!
    Ellos saben perfectamente la clase de mamá que tu eres, de ahí sus sonrisas y abrazos!
    Todos tenemos malos días, es humano, no te culpes por ello!
    Mucho animo!
    Besos

    ResponderEliminar
  2. Seguro que hoy es un mal recuerdo y la semana marcha mucho mejor. Todos tenemos derecho a tener días malos, nosotras también, y seguro que ellos ya te tienen perdonado lo que paso ayer.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si, parece que me han perdonado. Gracias por comentar! un beso!

      Eliminar
  3. No te sientas mal, todas las mamis tenemos días de esos, forman parte de la maternidad... Quisieras ser mas paciente y dialogar pero a veces nos saturan y perdemos los nervios, q oye! Somos humanas! Yo asumo q forma parte de ser madre, y q ellos lo toman a bien, saben q forma parte de educarlos... Animo guapa!

    ResponderEliminar
  4. Como te entiendo, como me gusta leerte, sabes expresar muy bien tus emociones, lo que sientes, como te sientes...me siento muchas veces identificada contigo. DE mala madre nada, es muy díficil lo que haces, tiene mucho mérito, yo solo tengo una, ayuda de mi marido y pierdo la paciencia, grito sin querer y también alguna colleja sale, así que te admiro mucho. Sigue así!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Elena, muchas gracias por tus palabras. Me honra que me admires...Un abrazo!

      Eliminar