Su mundo...el mío.

Hay días en los que estoy cansada y todo me pesa...

Me pesa levantarme sola, afrontar mi mundo sola, mirarlos a ellos y sentir, por décimas de segundo que en ese preciso instante, solo me tienen a mi...

Sé que siempre tendrán a su padre y no les fallará. Pero a mi si me ha fallado.

Y me pesa...

Me pesa ir a comer un domingo sola, o verme entre matrimonios, sola...

No poderme ni medio tomar el café porque tengo que correr detrás de Juanito, cambiarle el pañal, repartir meriendas, mirar con sólo dos ojos a tres niños...

Nuestros niños...

Ocuparme de que no se peleen, de que no griten, de que tengan cuidado...

Y aunque mis niños son tres soletes, son niños...

Y me cuesta, me cuesta enfrentarme a todo sola. Y siento que a veces tengo que gritar, y patalear, o escribir...Escribir, escribir...hasta que ya no me quede nada dentro...

Porque es tan difícil...

Sé que son muchas las mujeres las que se enfrentan a mi situación actual. Mujeres separadas, madres, campeonas que miramos al frente con valentía. Que nos dejaron solas en la mitad del camino pero que tenemos mucho por lo que luchar.

Yo a veces siento que puedo con todo, que esto no me hundirá, que si he vivido casi toda mi vida sin él, ¿cómo no voy a ser capaz de superar esto?.

Y sé que soy fuerte pero simplemente a veces, me pesa...

La carga es demasiado pesada, y me da pena, tanta tristeza que él no nos eche de menos, que haya preferido otra vida...otro mundo...otro aire...

Y necesito desahogarme, y gritar, y patalear...Y escribir...

Porque a veces me gustaría despertarme y ver que ha sido una pesadilla...

Y a pesar de todo, me levanto, aunque me cueste, y sonrío, y nos ponemos guapos y nos vamos a pasear, a vivir, a reír...a intentar ser felices. Aunque me pese...

Porque por ellos...me levanto, y grito y peleo...

Porque su risa, es mi risa. Su felicidad, la mía.

Y su mundo...el mío...

Sed felices

Besos desde el Sur