Sin miedo al Parto...

Ya no me queda nada. Un último tirón. Cinco semanas, quizás menos para verle la carita a mi niño...

Ojalá no llegue a cinco...

Y estoy como una niña con zapatos nuevos...

Porque qué queréis que os diga, pero el día del parto se me antoja como algo maravilloso.

No nos engañemos, parir duele, y mucho. Pero todo merece la pena.

Desde el minuto uno en que eres consciente de que el gran día ha llegado, porque podrás tener mil contracciones de Braxton Hicks y pensar más de una vez en eso de "Niño coge la maleta que nos vamos para el Hospital...", que llegado el día D...sabes que todo lo que has pasado hasta ese momento eran cosquillas con lo que se te viene encima...

Pero a pesar de todo es un día tan especial...

Saber que sólo te faltan unas horitas, unas horitas un poquito malas, pero que en nada estarás achuchando a tu bebé...Esa felicidad no es comparable con nada en absoluto.

Yo ya estoy incómoda, la verdad. Duermo fatal por las noches, me siento cansada, y la ciática ya no me da tregua...

Ayer mi marido me decía: "Qué haces tirada en el suelo muerta de risa?". Pues reirme por no llorar porque del latigazo que me da la ciática en la pierna es que no me puedo ni incorporar. Ayer a duras penas pude vestir a mis hijos...Porque ir a por el cepillo de Cayetana al baño se convirtió en una ardua tarea...

El Chiquito a mi lado es un "aficionao"!!!.

Así que amigas mías, estoy deseando que llegue el momento del parto.

Aún sigo trabajando, pretendo durar un par de semanitas más y retirarme...

Siempre le digo a Juanito que aguante para terminar el trabajo. Otra más para ultimar sus cositas.

Y que estando ya de 38 semanitas, mi niño a su casa viene.

Que le espero con los bracitos abiertos y que todos estamos deseando conocerlo y achucharlo.

Feliz lunes

Besos desde el Sur